Bienvenido al Paseo Ecológico de Benissa, un lugar que impresiona por su belleza virgen y el perfecto equilibrio entre el hombre y la naturaleza. Este sendero costero de la Costa Blanca es mucho más que una ruta de senderismo: es una experiencia, una escapada y una declaración de amor a la costa mediterránea.
La génesis: del sueño a la realidad
El Paseo fue una vez nada más que una visión: una conexión entre las bahías más bellas de Benissa que armoniza la naturaleza y las personas. A finales de los años 90, este sueño se hizo realidad. Con gran sensibilidad, se creó un paseo que no sólo hace justicia al paisaje, sino que también se pronuncia a favor de un turismo suave. Sin edificios de hormigón, sin vallas que impidan la vista: aquí la naturaleza tiene prioridad.
Lo que le espera en el Paseo
El Paseo Ecológico no es una ruta de senderismo de alta velocidad. Es un sendero de placer, una invitación a bajar el ritmo. El sendero, en buen estado, serpentea a lo largo de la costa durante unos tres kilómetros, desde el pequeño puerto deportivo de Les Bassetes hasta Cala de la Fustera. Acantilados escarpados, calas escondidas y el azul infinito del Mediterráneo ofrecen impresiones inolvidables.
Las plataformas de madera invitan a detenerse un momento. Si lo desea, puede simplemente sentarse allí y dejar vagar su mirada por las rocas, el mar y tal vez un barco pesquero en el horizonte. No es de extrañar que el tiempo parezca detenerse aquí.
Una fiesta para los sentidos
El Paseo es una experiencia para todos los sentidos. El aroma de los pinos, el tomillo silvestre y el romero inunda el aire, mientras que el suave sonido de las olas tiene un efecto calmante. Sus ojos quedarán cautivados por la espectacular vista de las aguas cristalinas.
Destacan las calas escondidas a lo largo del camino. La Cala de la Fustera impresiona por su arena dorada, sus aguas turquesas y la sombra de sus árboles, ideal para un descanso o un refrescante baño.
Un paraíso para los exploradores
El Paseo ofrece algo más que senderismo. Los paneles informativos que hay a lo largo del recorrido ofrecen interesantes datos sobre la flora y la fauna, así como sobre la historia geológica de la región. Las rocas por las que pase le hablarán de millones de años de historia geológica. Y, con un poco de suerte, podrá ver un águila pescadora o un lagarto calentándose al sol.
Apto para todos los públicos
La belleza del Paseo es que está hecho para todos. Las familias con niños pueden chapotear en las calas, los románticos disfrutar de la puesta de sol desde un mirador. Los visitantes más deportistas utilizan el paseo para hacer footing o marcha nórdica. Y, por supuesto, es ideal para cualquiera que simplemente quiera relajarse.
Otra ventaja: el sendero también es apto para excursionistas menos experimentados. Sin subidas empinadas ni pasos complicados, todo el mundo puede disfrutar aquí del ambiente costero mediterráneo.
Por qué merece la pena el Paseo
Hay muchos senderos costeros en la Costa Blanca, pero sólo unos pocos consiguen este equilibrio: el Paseo Ecológico es tranquilo, pero no solitario. Cercano a la naturaleza sin ser remoto. Y demuestra que el turismo sostenible puede funcionar cuando las personas y la naturaleza coexisten en armonía.
La combinación de unas vistas impresionantes, un toque mediterráneo y un concepto respetuoso con el medio ambiente lo convierten en una visita obligada para cualquiera que busque autenticidad. Sin montajes ni espectáculos innecesarios, solo la belleza virgen de la costa de Benissa.
Pruébelo
Ya sea por unas horas o por un día entero, el Paseo Ecológico de Benissa es el lugar perfecto para experimentar la Costa Blanca en su forma más pura. Póngase un calzado cómodo, lleve agua y quizás un pequeño picnic, y listo. Una cosa es segura: recordará este paseo durante mucho tiempo.